La concejal de Bogotá Diana Diago emitió una preocupante denuncia tras recibir una respuesta a un Derecho de Petición presentado ante la Secretaría de Seguridad, Convivencia y Justicia. De acuerdo con la información suministrada por la entidad, de las 5,824 cámaras de seguridad que deberían estar funcionando en la ciudad, 1,789 —es decir, el 30%— se encuentran actualmente fuera de servicio, “¿Cómo se puede combatir el crimen si estamos a ciegas? ¿Cómo van a realizar capturas si las cámaras son un simple  adorno? Esta es una situación que deja a importantes zonas de la capital sin una vigilancia adecuada” señaló Diago. 

Los datos proporcionados detallan que de estas 1,789 cámaras que están fuera de funcionamiento, 814 están deshabilitadas debido a problemas de conectividad, lo cual es responsabilidad directa de la Secretaría de Seguridad. 

La concejal Diago advirtió que esta situación es alarmante, ya que afecta especialmente a localidades de alta peligrosidad como Ciudad Bolívar y Kennedy, donde 189 y 187 cámaras, respectivamente, se encuentran fuera de servicio.

«Estamos hablando de un número crítico de cámaras inoperantes en sectores que requieren vigilancia constante debido a los altos índices de inseguridad. Este nivel de inoperancia en el sistema de videovigilancia de Bogotá refleja negligencia que está poniendo en riesgo la seguridad de los ciudadanos y muestra una clara falta de gestión en la Secretaría de Seguridad,» declaró la concejal Diana Diago.

La ineficiencia en el sistema se atribuye a varias causas, entre las que se destacan:

•⁠  ⁠Fallas en conectividad: 814 cámaras.

•⁠  ⁠Mantenimiento: 667 cámaras.

•⁠  ⁠Daños por Siniestros: 117 cámaras.

•⁠  ⁠Fallas de energización: 103 cámaras.

•⁠  ⁠Obras civiles (por parte del Instituto de Desarrollo Urbano – IDU): 88 cámaras.

Definitivamente Galán no ha dado pie con bola en el manejo de la ciudad, y menos en el control de la inseguridad.

La concejal Diago exigió a la Secretaría de Seguridad tomar medidas inmediatas para reparar y poner en funcionamiento estas cámaras y establecer planes de mantenimiento preventivo para evitar que estos problemas persistan. “Ni las cámaras, ni el alcalde, ni el secretario de seguridad sirven en Bogotá. La seguridad de Bogotá no puede depender de un sistema de vigilancia que esté operando a menos del 70% de su capacidad. Necesitamos soluciones concretas, rápidas y efectivas,” concluyó Diago.

Este llamado busca que el Distrito priorice y asegure el funcionamiento de la infraestructura de videovigilancia, especialmente en las zonas más vulnerables, y que se garantice la seguridad de los ciudadanos en Bogotá.

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