Diana Diago busca contrarrestar los efectos del cambio climático y contribuir a la reducción de los costos asociados al consumo de energía en la ciudad a través del proyecto de acuerdo que presentó en el Concejo de Bogotá.
La iniciativa requiere la adopción de lineamientos para la utilización de fuentes no convencionales de energía y la gestión eficiente de la energía en Bogotá.
“El cambio climático es una realidad y la ciudad debe prevenir las graves consecuencias de este fenómeno. Es por esta razón que con acciones tan sencillas podemos combatir las malas prácticas de sostenibilidad y cuidar el medio ambiente,” señaló la concejal.
A raíz de lo anterior, en su proyecto de acuerdo Diago incluye la incorporación de fuentes alternativas en cualquier tipo de construcción, siempre y cuando su instalación no represente un riesgo para las construcciones cercanas.
Además, se permitirá la libre elección del tipo de fuente y dispositivo empleado para la generación de energía. Algo para tener presente es que la fuente alternativa de energía instalada deberá ser proporcional al tamaño de la edificación y exclusivamente doméstica. No se permitirá la instalación de dispositivos sobre el espacio público y/o antejardín de las edificaciones.
Para la verificación de lo anterior, se conformará una comisión técnica integrada por el Grupo de Energía de Bogotá, la Secretaría Distrital de Planeación y la Secretaría Distrital de Ambiente para estructurar y evaluar los lineamientos.
Los ciudadanos que decidan adoptar estas fuentes alternativas de energía tendrán beneficios tributarios establecidos por la ley para la adopción de nuevas fuentes de energía alternativa.
Para la implementación de este acuerdo es necesario que el Concejo de Bogotá apruebe en plenaria esta iniciativa. Una vez se tenga el aval, se tramitará la firma a la alcaldesa de la ciudad. Luego, la administración tendrá un plazo de un mes para crear un informe de implementación de los lineamientos y seis meses para el desarrollo del acuerdo.
Este proyecto de Acuerdo se enfoca en la adopción de fuentes de energía alternativas en Bogotá, con el objetivo de reducir la dependencia de fuentes convencionales y avanzar hacia un modelo más sostenible. Actualmente, más del 70% de la energía en Colombia proviene de fuentes hidráulicas, y es importante diversificar nuestras fuentes de energía para enfrentar los desafíos del cambio climático.