Más de 30 comerciantes ubicados en la plaza de mercado Santander, ubicada en la localidad de Antonio Nariño, están afectados porque después de año y medio de obras de remodelación y adecuación estas aún no terminan.
“Lo peor es que aún no va a terminar esta intervención porque el contrato se liquidó sin finalizar las obras y no hay recursos para ejecutarla. La plaza está funcionando a medias y los comerciantes han visto reducidos sus ventas, empeorando la situación que ya les generó la pandemia”, indicó la concejal Diana Diago.
El Instituto para la Economía Social – Ipes, entidad contratante de la obra, realizó un contrato para el mantenimiento en 19 plazas de mercado de Bogotá. De este, cerca de 1.500 millones de pesos irían a la plaza Santander.
En el año 2019 inició la remodelación y según el Ipes esto duraba seis meses, pero por la mala planeación este contrato se suspendió 11 veces, se hicieron cuatro prórrogas y una adición presupuestal, señaló la Cabildante.
Asimismo, hizo el llamado al distrito para que adecúe rápidamente este espacio. “Si se quiere reactivar la economía en la ciudad, se debe apoyar a los comerciantes, y una forma es culminando esta obra en el menor tiempo posible para que ellos puedan vender sus productos sin altibajos y las personas puedan volver a visitar esta plaza”, concluyó la concejal Diana Diago.