La concejal Diana Diago concluye el debate de seguridad en el Concejo de Bogotá, reiterando que la situación de inseguridad sigue siendo preocupante, que la estrategia en torno a la seguridad fracasó.
En el Concejo de Bogotá se realizó el cierre del debate de seguridad, en la sesión, la concejal Diana Diago hizo varios llamados de atención y reflexiones en torno a las estrategias de seguridad que se implementaron en la ciudad. Cuestionó que problemas como el microtráfico, entornos escolares que cada vez son más inseguros y el consumo de drogas, siguen afectando seriamente a los habitantes de la ciudad.
La administración de Claudia López no se puede conformar con contarle a los ciudadanos que se han desmantelado unas bandas criminales ya que se necesitan resultados en las problemáticas del día a día que viven los bogotanos, robo de celulares, atracó, fleteo, entre otros. También hizo un llamado a mejorar la articulación entre las diferentes entidades del distrito.
También señaló: “Cómo ponente del presupuesto me preocupa el recorte que sufrió la cartera de seguridad, que debería ser una de las más fortalecidas. Con pobreza no se combate la delincuencia. En el presupuesto a la seguridad solo le toca el 1,14%. Eso no es un mensaje sano para la ciudad. Afirmó la concejal Diago en la corporación.
Además, la concejal Diago afirmó que es mentira que Bogotá se pueda catalogar como la ciudad más pacífica de Colombia. De acuerdo con las cifras y los casos que se han evidenciado a lo largo de este año, los delitos de alto impacto registrados aumentaron en 17.353 frente a 2021.
Ante el aumento de casos, la concejal Diago mencionó: “La ciudadanía tiene miedo y lo que hace la administración, es poco o nada para garantizar la seguridad en Bogotá. El estado tiene la obligación de proteger a sus ciudadanos”.
La concejal Diana Diago reiteró su interés en conocer las estrategias para mejorar la seguridad de los entornos escolares y en los sistemas de transporte. Además, hizo hincapié en fortalecer los métodos de denuncia ciudadana y en usar la georreferenciación de los delitos para actuar de manera más acertada en la previsión y reacción frente al delito.